El ALCA no alcanza a los pobres




Quito, 19 de abril del 2001.

CONAIE



Cuanta alegría podría significar para los países de latinoamerica, y sus poblaciones mayoritariamente pobres, todo lo que pueda significar intercambios comerciales, políticos, culturales, en términos de equidad, reciprocidad, solidaridad y alta participación de los diferentes sectores de nuestras sociedades.

Pero lamentablemente, nos da mucha preocupación cuando el proceso del Area de Libre Comercio de las Américas, ALCA, esta diseñado para garantizar unidireccionalmente el mercado latinoamericano desde los intereses de las empresas transnacionales norteamericanas.

Lo peor, es que muchos de nuestros gobiernos, en actitud servil, conducen irresponsablemente a nuestros países a un torbellino del que pagaremos las consecuencias los Pueblos Indígenas y diferentes sectores productivos del país, incrementando los niveles de explotación, desempleo destrucción ecológica, hambre y miseria, así como dependencia y la consecuente pérdida absoluta de soberanía.

De ahí que respaldamos toda acción de rechazo al ALCA que se desarrolla desde nuestros países, así como en Canadá. Los millones de gritos deben ser escuchados por los gobernantes y las transnacionales de la muerte.

Es hora de proponernos nuevos estilos de integración entre los pueblos, a pesar de que nuestros gobernantes sigan actuando como robots controlados desde las transnacionales norteamericanas.

Vamos creando iniciativas de desarrollo alternativo desde la sociedad civil. Solo nuestros altos niveles de participación garantizarán que estos procesos sean equitativos y justos a fin de superar la pobreza y la dependencia.

Ricardo Ulcuango

VICEPRESIDENTE CONAIE






 
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