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Sobre el ITT y otros cuentos

Comisión de Prensa de Orellana

Boletín de prensa

Francisco de Orellana, 23 de abril de 2007

El Producto Interior Bruto del Ecuador pasó de 28.000 millones de dólares en 2003 a más de 40.000 millones en 2006. Un espectacular crecimiento de la economía del 40% en apenas 4 años. En este tiempo, con la puesta en funcionamiento del OCP, se incrementó considerablemente la producción de crudos pesados. Esto unido al incremento del precio del petróleo en el mercado internacional, explicaría en gran medida este impresionante crecimiento. Sin embargo eso no significa que los más pobres del país se hayan beneficiado, primero porque gran parte de la renta generada se va directamente al extranjero, segundo porque la queda aquí se distribuye mal, entre unos pocos, entre los más vivos, entre los más corruptos. En Orellana, a pesar de todo esto seguimos sin hospital que merezca llamarse tal, ni banco de sangre tenemos.

El gobierno, en consonancia con el ritmo general de crecimiento económico, también ha visto en estos años como se incrementaban sus ingresos y por tanto su presupuesto. Así pasamos de 6.300 millones de dólares en 2003 a más de 9.700 para 2006. Estamos hablando de un incremento de más de 3.000 millones de dólares. En Orellana, sin embargo, eso no fue suficiente para construir el Hospital. Tampoco sirvió para dotar de agua potable y electricidad a los cantones más pobres de la patria. Por supuesto el aumento de la producción y el precio del crudo, mejoró los ingresos del gobierno, pero fueron dos hechos del último año los que elevaron los ingresos por encima de los mil millones, estamos hablando de la Reforma a la Ley de Hidrocarburos (la famosa Ley de los 600 millones) y la caducidad del contrato de Occidental. Esta inyección de dólares tampoco ha servido para construir hospitales en el Oriente.

Esta mañana, el Presidente de Petroecuador, Ing. Carlos Pareja Yannuzzelli, nos contaba en una entrevista en televisión, que Ecuador no puede permitirse dejar el petróleo en el suelo teniendo el país tantas necesidades. Uno de los ejemplos que ponía era que en el Oriente no teníamos hospitales. ¿Será verdad que los recursos que genera el ITT van a servir esta vez para que tengamos un hospital en Orellana?, ¿podría asegurar eso el Ing. Pareja? Más bien no, lo más probable es que esos recursos se pierdan de nuevo por las tuberías de la corrupción y los desagues que se llevan los capitales al extranjero. No es seguro, pero hay una probabilidad alta. Es cierto que el gobierno va a intentar atacar a la corrupción y repartir mejor la riqueza, pero ¿podrá conseguirlo?

Lo que nadie duda es que la explotación del ITT provocará fuertes impactos ecológicos en el parque Nacional Yasuní. ¿Cómo puede decir el Ing. Pareja que sólo se necesita usar 100 hectáreas? No nos creemos que no conozca el impacto que provocará la reinyección en el subsuelo de miles de millones de barriles de aguas de formación. Nadie duda tampoco del impacto sobre los pueblos ocultos que habitan el área. No sólo los ocultos, es un hecho demostrado que en aquellas comunas kichwas dónde empieza la actividad petrolera, automáticamente se deja de sembrar maíz, aumenta el alcoholismo y se producen peleas entre los comuneros, poniendo la organización de la comuna al borde de la destrucción. No es la primera vez que ocurre, se repetirá la historia en las comunas del Bajo Napo. No llegará el desarrollo, cómo no ha llegado a tantas comunas directamente afectadas por la actividad petrolera en estos años.

¿Qué va a pasar si no se consiguen del extranjero los 350 millones de dólares para no explotar el ITT?¿Lo explotaríamos si sólo conseguimos 200 millones? ¿Será esa diferencia la que saque de la miseria al país? Para nosotros todo esto no tiene sentido. La única postura digna es no explotar el ITT, eso para nada condenaría a la miseria, no nos creamos los cuentos. Con los recursos que genera el país ahora se pueden hacer muchas cosas y el Ing. Pareja lo sabe. Lo del ITT no es cuestión de vida o muerte.

Nos permitimos algunas sugerencias para conseguir los 750 millones que nos daría el ITT, sin tener que recurrir a una llamada desesperada a gobiernos y ONGs extranjeras. Seguro que todas ellas están en la mente del Presidente Correa, le animamos a que las lleve a cabo, si lo realiza con decisión no tenemos por qué explotar el ITT.

El problema parece ser a quién te enfrentas. Si se toman las medidas anteriores, te enfrentas a las multinacionales extranjeras, a los ricos locales, a los corruptos, a los evasores de impuestos, en fin los que hasta ahora han mandado en el país. Eso va a ser duro, no se van a dejar quitar el hueso.

En cambio, explotar el ITT te enfrenta sólo a movimientos ecologistas minoritarios (eso creen). Los kichwas no protestarán, será fácil callarlos con poco (eso creen también), ni hablar de los no contactados que esos ni existen. También imagino que muchos enfrentarán problemas de conciencia, pero eso no crea problemas de opinión pública.

Queremos por último decirle al Sr. Pareja que nosotros en Orellana seguimos reclamando el Hospital, pero no aceptamos que salga en televisión usándonos como coartada para lo del ITT. Las cosas para nada son como usted las cuenta.

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