Quito, 16 de diciembre de 2005
Para los habitantes de veinte comunidades, en un cantón ecológico, los efectos ambientales y humanos que la empresa minera "Ascendat Exploration Copper" causa a diario, en la zona de Intag, son graves.
Eso motivó que cerca de 300 personas, con fuego en mano y la decisión de que escuchen su voz de protesta, incendearan el campamento de la minera.
Ante las diferentes versiones que circulan en cuanto a las medidas de hecho realizadas en Chalguayacu Bajo, Cantón Cotacachi, Ecuador el día sábado 10 de diciembre del 2005 en la cual se destruyó totalmente el campamento minero de la empresa minera Ascendant, queremos emitir nuestro punto de vista de los hechos basados en la verdad.
La medida contó con la participación de mas de 300 moradores de unas 20 comunidades de la zona de Intag, principalmente las mayormente afectadas y amenazadas. No hubo robo de bienes de la empresa ni heridos tal como falsamente difunde la empresa. El parte policial confirma lo expuesto.
La decisión de recurrir a esta medida de hecho y tomar el control comunitario de las tierras de la empresa fue tomada en forma democrática y participativa por todos los presentes. Si la empresa no escucha el clamor de las comunidades éstas se verán obligadas a tomarse los otros predios, como única medida de defensa.
Este hecho se da después de cerca de 2 años de la presencia de la empresa en Intag, lo cual ha intentado generar división en las comunidades. La medida es también en reacción legítima a las constantes agresiones, abusos y atropellos de la empresa en contra de gobiernos locales, organizaciones, dirigentes comunitarios que se oponen a la minería, incluyendo: amenazas de muerte, agresiones físicas, bloqueos de carreteras, e intentos de invasión de tierras de la comunidad de Junín.
La oscura compra de tierras por parte de la empresa ha sido una de las cosas más repudiadas por nuestras comunidades y ninguna autoridad o institución ha sido capaz de detenerla.
Rechazamos la irresponsable versión de la empresa en la cual se dice que se destruyó una clínica y "que las comunidades le están pidiendo que se reconstruya". Es otra mentira mas, porque en verdad, lo que se destruyó fue el campamento de la empresa minera Ascendant, donde con frecuencia se reunían sus funcionarios para planear tanta agresión e intimidación a nuestras comunidades. En Chalguayacu Bajo actualmente se construye una clínica con fondos del Estado, como debería ser. Las comunidades aledañas al proyecto minero, incluyendo La Armenia, Junín, Cerro Pelado, Barcelona, El Triunfo, y Chalguyacu Bajo, no le han solicitado nada a la empresa a parte de pedirle que se retire definitivamente de Intag.
Nadie más que la multitud presente es responsable por los hechos del sábado. Rechazamos categóricamente la absurda acusación en el sentido de que ciertos dirigentes de la DECOIN son responsables.
Exigimos que la empresa minera:
Aprovechamos la presente para denunciar ante los medios de comunicación que la empresa minera Ascendant Copper Corporation pretende presentar próximamente un estudio de impacto ambiental para su proyecto minero ante el Ministerio de Energía y Minas, pero que jamás ha ingresado al área minera para realizar dichos estudios, tal como exige la ley. Cada vez que la empresa o sus representantes han intentado ingresar a estas áreas han sido rechazados. Nuestras comunidades jamás han sido consultadas por lo que exigimos a todas las instituciones del Estado respeto a nuestros derechos constitucionales, en especial el derecho a vivir en un medio ambiente sano y libre de contaminación; de ser consultados, y de escoger el sitio de residencia. ¡No queremos la minería!
Comisión de prensa, Consejo de Desarrollo Comunitario
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