Logo Llacta!

La ONU tiende una mano a pueblos indígenas aislados de Sudamérica

Diario El Comercio, edición digital

Quito, 1 de diciembre de 2006

La Paz, Agencia EFE

El Alto Comisionado para los Derechos Humanos de la ONU tendrá un área de trabajo específica destinada a proteger a los pueblos indígenas aislados de Sudamérica, cada vez más vulnerables a las injerencias de agentes externos.

El compromiso de Naciones Unidas deben completarlo los Gobiernos de los países en los que viven esas comunidades, mediante leyes que garanticen su supervivencia, tal como subrayó a Efe el responsable de asuntos indígenas en el Alto Comisionado, Julian Burger.

Tras participar en el Seminario Regional sobre Pueblos Indígenas Aislados y en Contacto Inicial de la Amazonía y Gran Chaco, que tuvo lugar la semana pasada en Santa Cruz, en la región tropical de Bolivia, Burger reconoció que casi todo está por hacer y que es "urgente" dar visibilidad a esta materia.

A pesar de la dificultad de proporcionar cifras precisas, los expertos calculan que casi un centenar de estos pueblos viven en siete países de la región amazónica y chaco (Bolivia, Paraguay, Brasil, Colombia, Ecuador, Perú y Venezuela).

Entre los expertos está la peruana Beatriz Huertas, coordinadora del Grupo Internacional de Trabajo sobre Asuntos Indígenas (IWGIA, por su sigla en inglés) con sede en Dinamarca y para quien es necesario diferenciar los grupos "aislados" de los que están "en contacto inicial".

Los primeros rechazan establecer relaciones de "interacción sostenida" con la sociedad que les rodea dado que, como relató Huertas a Efe, según datos históricos sus antecesores tuvieron experiencias de contacto "sumamente traumáticas" y a causa de ello optaron por el aislamiento.

Mientras, los segundos son aquellos que están empezando a restablecer algún tipo de vinculación con el mundo exterior, principalmente debido a los contactos forzados por agentes externos.

Para la coordinadora de IWGIA, este segundo grupo es el más vulnerable a las enfermedades por su mayor grado de exposición y su dificultad para desarrollar defensas inmunológicas.

Por contra, la usurpación de los territorios que habitan es un problema común a ambos tipos de comunidades, más aún si se tiene en cuenta -apuntó Burger- que los propios estados otorgan concesiones a los madereros para operar en unas tierras que deberían estar protegidas.

Los gobiernos tienen que elaborar leyes al respecto, sostuvo el representante de la ONU, quien además insistió en la necesidad de que primen sobre intereses económicos como los que manifiestan las empresas de hidrocarburos o los terratenientes de soja en Brasil.

Precisamente este país es pionero en la protección de algunas de las comunidades asentadas en su jurisdicción, gracias a la instalación de "puestos de vigilancia" que delimitan el territorio perteneciente a cada grupo y están alerta por si surge alguna emergencia sanitaria.

No obstante, el hecho de que representantes gubernamentales de los siete países implicados asistieran al seminario de Santa Cruz demuestra, y en eso coincidieron Burger y Huertas, la "buena disposición" de todos ellos.

El riesgo de que algunos de estos pueblos se extingan es real y, por tanto se trata de "proteger vidas humanas", según Burger.

¿Quién sabe cuántos grupos, con sus peculiaridades lingüísticas y culturales, habrán desaparecido a causa de nuestra negligencia?" se pregunta el responsable del Alto Comisionado.

La existencia de estas comunidades representa un desafío para el mundo moderno, en palabras de Burger, porque resulta "extraordinario" que en una sociedad como la actual todavÍa haya personas que elijan el aislamiento como forma de vida.

Agregó que hay maneras de cooperar e interactuar con estos pueblos, pero debe hacerse a su ritmo y respetando sus tiempos.

El encuentro de Santa Cruz se saldó, en opinión de Beatriz Huertas, con un claro y contundente compromiso del Alto Comisionado de la ONU con la atención a los indígenas, reflejado en su intención de tener y formar a expertos en la materia.

El rol de las Naciones Unidas como organismo supranacional es sumamente importante para ejercer una mayor vigilancia sobre las acciones puestas en marcha por los gobiernos de cada país, comentó la coordinadora de IWGIA.

Buen síntoma es también el hecho de que el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) esté elaborando un diagnóstico sobre la situación de estos poblados con objeto de apoyar futuras actuaciones al respecto.

[fuente]
http://elcomercio.terra.com.ec/noticiaEC.asp?id_noticia=78551&id_seccion=5

Valid XHTML 1.0! Valid CSS!

:: http://www.llacta.org ::